VILLA ELISA
La llegada de la guerra civil supuso una nueva etapa para la historia de las villas. Toda la zona residencial se destinó a un uso militar, principalmente como hospital y lugar de recuperación para los heridos. Las Brigadas internacionales incautaron las propiedades y las convirtieron en cocinas, dormitorios, hospitales de cama o quirófanos, como sucedió con el hotel Voramar. Lo cierto es que, tras la contienda, todo cambió.
En los primeros años de la década de los 40, un personaje ilustre como fue Don Joaquín Bau, vicepresidente del Consejo del Reino, junto con su esposa, Doña Elisa Carpi llegaron a Benicàssim. La familia había adquirido un solar donde habían estado las primitivas villas del matrimonio Coloma. Allí construyó su residencia de veraneo.La nueva villa fue bautizada como Villa Elisa y pronto se convirtió en el centro de reuniones más conocido y activo de todo el paseo marítimo. Fue como el renacer de la época dorada de las villas.
Ahora, Villa Elisa es uno de los más bellos palacetes que quedan en el paseo y su futuro, como centro de congresos, volverá a conferirle, sin duda, el esplendor que tuvo el siglo pasado, manteniendo vivo así el espíritu inquieto de las villas de Benicassim.